En el Aikido se trabajan proyecciones, luxaciones, estrangulaciónes e inmovilización es a mano vacía, ante ataques de puño y pierna y agarres. El trabajo de armas también es muy relevante, usándose la espada y bastón de madera, boken y jo, así como el cuchillo y la espada corta (tanto y wakizashi). El trabajo de armas suele se una guía de los trabajos de mano vacía.

Una de las características del Aikido es que no busca el uso de la fuerza bruta para derrotar al adversario, sino de trabajar sobre el ataque de este para desequilibrarle, romper su eje y entrar sobre su centro.

El Aikido se puede practicar a cualquier edad y con cualquier condición física ya que cada aikidoka adapta el Aikido a sus condiciones, y al no haber competiciones no se plantean situaciones en las que no se pueda entrenar. Sí bien es cierto que aunque existe el Aikido infantil, este es más un juego, una serie de ejercicios para entretener a los niños y no se puede trabajar los conceptos más avanzados, por lo que la edad ideal para practicarlo podría ser a partir de los 13-15 años.